Edredones nórdicos: trucos para el correcto lavado
Los edredones nórdicos, al igual que la ropa de cama hay que lavarla regularmente para una higiene impecable y dormir con esa maravillosa sensación de olor a limpio. Es cierto que cálido y confortable, los edredones nórdicos son, sin embargo, un nido de ácaros y pequeña suciedad ¿Cuándo y sobre todo cómo debes lavar tus edredones nórdicos? Aquí tienes algunos consejos para lavar correctamente tu edredón.
¿Con qué frecuencia debes lavar tus edredones nórdicos?
Pensamos regularmente en lavar la funda de nuestros edredones nórdicos generalmente cada semana o 15 días, pero pensamos menos en lavar los edredones en sí. Sin embargo, estos también se ensucian y pueden llegar a ser un acogedor nido para los ácaros del polvo y los malos olores. Tanto si tu edredón es de plumón, plumas de ganso o fibras sintéticas, lo mínimo es lavarlo al menos una vez al año.
Puedes hacerlo aprovechando el cambio de estación, y limpiarlos en primavera e invierno. Pero si sufres de alergia, es recomendable lavarlos una vez al mes.
Sacude tus edredones nórdicos de manera regular
Unas simples acciones diarias de sacudido pueden permitirte espaciar el lavado de tus edredones nórdicos. Aunque tengas una funda protectora, también puedes pasarle una aspiradora de vez en cuando, cuando cambies la funda por ejemplo. Airearlo, agitarlo para que encuentre su forma, y también puede tenderlo fuera en días secos y soleados.
Precauciones a tomar antes de lavar tu edredón
Antes de lavar tus edredones nórdicos, debes revisar dos cosas muy importantes:
La etiqueta con las instrucciones de cuidado del edredón: Te indicará claramente cómo puedes lavarlo, si a mano o a máquina, si puedes usar detergente o lejía, y si puedes ponerlo en la secadora.
Que tus edredones nórdicos no tengan agujeros ni costuras descosidas: Si las plumas o el relleno logran salirse durante el lavado, estas pueden dañar tu lavadora y por supuesto, tus edredones.
Lavar tus edredones en la lavadora
No todos los edredones nórdicos se pueden meter en la lavadora. Los de fibras naturales en particular, son muy frágiles. Y para aquellos que son demasiado gruesos, puede ser necesario un viaje a la lavandería. Pero si tus edredones caben bien en tu lavadora, intenta distribuirlos uniformemente en el tambor, llenando tu lavadora solo 3/4 porque con el lavado absorberá agua y tomará volumen y peso.
Lávalo solo, para que tenga el espacio necesario, y puedes añadir pelotas de tenis limpias para que salga más limpio y flexible. Lo mejor es programar un ciclo para tejidos delicados, con una pequeña cantidad de detergente muy suave. La etiqueta te indicará qué temperatura usar, pero ten en cuenta que la mejor manera de eliminar los ácaros del polvo es un ciclo de lavado a 60°C.
Lavar tus edredones a mano
Más tedioso, pero a veces necesario es lavar tus edredones nórdicos a mano. Para esto puedes meterlo en la bañera con agua jabonosa o un poco de detergente suave, y frotar localmente para eliminar pequeñas manchas. Deja actuar el producto, y luego enjuaga bien. Te aconsejamos no retorcer el edredón para escurrirlo, ya que corres el riesgo de dañar el plumón. Lo ideal es colgarlo o tenderlo plano, para que gotee solo.
Se recomienda usar un suavizante casero, quitar las manchas con detergente suave y agua o una pasta de bicarbonato de sodio y vinagre blanco, y dejar secar al aire libre o con un secador de pelo. Después de la limpieza, se sugiere guardar el edredón en una funda para protegerlo de la humedad y el polvo.
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